domingo, 18 de noviembre de 2007

Aristocratas barriales en Murcia.

Los aristócratas de Quique González presentan credenciales en el auditorio Murciano junto a su cabecilla con una puesta en escena de lo más elegante, burdelesca, y americana. Poco tardamos en darnos cuenta que la nueva banda tenia solo eso de elegancia, les acompañaba un sonido mas fresco y menos clásico que de costumbre, es un nuevo toque al que no nos tiene acostumbrados el señor Quique, para alguien como yo el componente Carlos Raya a la guitarra era totalmente indispensable pero no tengo excesiva queja de su nueva formación, mas simplista eso si.

Un batería prometedor con falta de tablas escénicas aunque de gran talento. Y un guitarrista que aunque bueno en la ejecución y ambicioso en sus actos bien tendría que aprender de su antecesor que, lo que se dice con dos notas no hace falta decirlo con doscientas, quizás, en mi opinión personal, la verdadera genialidad es decir mucho con poco y de esto peca, aunque tiempo al tiempo. Confío en que es un diamante en bruto con falta de pulir bien, y formando parte de esta banda tiene todo a su favor para aprovechar y ganar la experiencia necesaria y llegar a la altura del gran Carlos Raya.
En fin una velada tranquila, un concierto de auditorio tampoco da para mas, aunque a poco mas de la mitad del concierto y notando los bostezos de la gente Quique y los suyos despertaron a la masa adormilada y demostraron de que son capaces y porque están donde están.

No cabe duda de la genialidad, la elegancia y la gran representación gráfica de las letras de Quique y de su sonido rock and roll, un suave paseo por amores de hotel, camareras, flores de una sola noche y la elegante canallería propia de un gran artista.

Ahora solo queda esperar con impaciencia la foto prometida por el amigo Aníbal junto a la estatua de Phil Lynott todo un logro para este nuestro blog.

lunes, 12 de noviembre de 2007

Charles Bukowski


Hank. El tito Buk. El poeta underground del siglo XX por antonomasia. El mismísimo Charles Bukowski. El otro día dediqué la tarde a visionar el documental “Born into this” y caí en la cuenta de que él, su obra y su espíritu se merecían una entrada en el blog.

Puede que muchos de vosotros no hayáis oído hablar de él en vuestra vida, a otros os sonará y quizá unos pocos ya os hayáis metido alguna vez en ese entramado de bares, de mujeres, de peleas, de borracheras, de oficinas de correos etc.

Esta entrada será de gran utilidad para el primer grupo y si, el hecho de leerla ya os lleva a pillaros alguna obra del amigo, pues contento que me quedo yo y eso que ganamos todos.

Voy a pasar de datos autobiográficos y toda esa basura porque para eso ya tenéis el intenné que cumple como nadie su función formativa. Yo voy por otro lado. Os comento de forma breve sus obras para mí más representativas y vosotros hacéis lo que os salga del hipotálamo y ya veréis que rato más apañao. Es mi pequeño homenaje a este monstruo, al poeta borracho, al mendigo antisistema, al loco descarnado, al entrañable Henri Chinaski.

1.- Peleando a la contra. Imprescindible si todavía no te has sumergido en el universo Bukowski. Se trata de una antología en la que se pueden encontrar relatos, poemas y fragmentos de novelas. Todos aquellos que queremos conocer de cerca la vida del viejo Bukowski tenemos la ventaja de que, como él mismo dijo “su obra es en un 90% autobiográfica” y en este volumen lo vas a comprobar de cabo a rabo porque los textos están ordenados no en el orden en el que fueron publicados sino en el contexto cronológico de la vida de autor. Un brillante trabajo de selección que además tiene la ventaja de incluir mucha poesía que, hasta ese momento, no había sido editada en español. Yo lo leí hace unos 5 años y me marcó bastante. Para muestra, el poema “Cáncer”, buscadlo y leedlo porque es durísimo y a la vez magnífico.

2.- Cartero. A través de su alter ego Henri Chinaski, el autor nos narra los días en que trabajó en una oficina de correos. Su importancia es más bien histórica porque fue la primera novela de nuestro amigo y es 100% bukowskiana.

3.- Música de cañerías. Libro de relatos ambientado en todo el universo del autor. Los bares, las pensiones de mala muerte, los trabajos de escritor por cuatro duros, la desilusión, el alcohol a mares. En fin, indispensable también y muy entretenido.

4.- Pulp. Su última novela. Editada en 1994, el mismo año de su muerte. Una especie de parodia muy divertida de las novelas detectivescas, con un increíble humor ácido y separada ligeramente del resto de obras típicas del autor. Libro de culto para paladares exquisitos.

5.- El capitán salió a comer y los marineros tomaron el barco. Uno de mis favoritos. Los diarios que escribió Bukowski en los últimos años de su vida. Sarcástico, irónico, a veces reflexivo, realista y, en muchos momentos del libro, sorprendido de ver en lo que se había convertido un tipo como él, un hombre que llegó a dormir en cubos de basura. El caso es que es interesante porque refleja la vida doméstica de un anciano que, después de haber sido la mayor parte de su vida un indigete, después de haber sido un mendigo, un trabajador en curros repugnantes, un alcohólico que durmió en pensiones rodeado de ratas, se ha convertido en un escritor querido y respetado que vive en un bonito chalé con jacuzzi y sobre el que se ha rodado una película y que asiste receloso a un concierto de U2 en el que el mismo Bono le dedica un tema. Contiene fragmentos y reflexiones ciertamente interesantes, propias sólo de aquellos que han vivido una vida tan descontrolada.

6.- Documental Born into this. Un recorrido por la vida de Charles Bukowski en el que podemos ver testimonios de su viuda, de su editor, de amigos, del cantante Bono, del actor Sean Penn y del mismísimo Tom Waits. Ahí queda eso.

7.- Película El Borracho. Decir que existe otra película posterior protagonizada por Matt Dillon llamada Factotum. Pero yo me quedo sin dudarlo un momento con ésta recreación de la vida del escritor. En ella, tenemos al gran Mickey Rourke haciendo y bordando el papel de Chinaski. La cinta además cuenta con el inesperado cameo del propio Bukowski. Imprescindible.

Bueno, eso es todo por hoy. Nada, sed buenos y espero que nos volvamos a ver pronto por aquí.

¡Ah, por cierto! Parece ser que en breve me marcho a Dublín, así que os prometo alguna entrada sobre la ciudad y una foto junto a la estatua del mismísimo..... ¡¡¡¡ Phil Lynott !!!!

Salud!